La Política, (el arte de convencer con
palabras) se basa en la mentira y la propaganda, busca conectar
directamente con nuestros sentimientos de grupo, de clase, de
nacionalidad, de raza, de ideología, etc..., segmentando, separando
e incluso enfrentando al pueblo por cuestiones muchas veces banales y
entreteniendo y desviando la atención de este de los asuntos
realmente importantes.
Mientras la gente demore y no afronte
lo realmente importante y se siga confrontando entre ella por asuntos
secundarios, la política tendrá el campo abonado para seguir
entreteniendo, despistando y aprovechándose para su propio
beneficio.
La política crea la escena, la
pantalla, se desenvuelve en el teatro mediático, es la
representación de los actores en una obra performance que interactúa
con el pueblo, haciéndole creer a este que realmente le representa
en el proceso de la toma de decisiones.
Mientas tras el escenario la agenda de
poder esta ya establecida y permanece imperturbable a la
escenificación que se desarrolla en el parlamento y los medios de
comunicación.
No son los políticos realmente los que
gobiernan, su papel consiste en disfrazar el poder real, ilegitimo,
de democracia, son meros intermediarios, ejerciendo su papel de
marionetas sin dejar ver en ningún momento la mano que las maneja.
Repito, no son los políticos realmente
los que gobiernan, ni tampoco tendrían que ser ellos, meros actores,
mascaras, oradores.
Es el pueblo, el soberano, el realmente
responsable y capacitado, mediante asambleas populares y valiéndose
de la consciencia como herramienta para ello.
La consciencia, entendida como la
capacidad de poder situarse en el entorno, de abstraerse de uno mismo
y ser capaz de desmontar nuestra visión egocéntrica de las cosas,
ser capaz de percibir los patrones de conducta, de moral, los dogmas
y paradigmas que nos limitan y manipulan.
La consciencia entendida como la
inquietud en formarse uno mismo, huyendo de la repetición, y
buscando la información mas diversa y contrastada.
La consciencia como esfuerzo y
sacrificio, en busca de los valores humanos, accediendo a ellos desde
la premisa de la libertad individual y la diversidad étnica, racial,
cultural..
La consciencia entendida en definitiva
como herramienta de evolución y desarrollo personal y colectivo.
La consciencia se manifiesta en cada acto altruista, humilde, sincero.
Es entorpecida por el estado hipnótico, dormido, dogmático de la mayoría de la gente, pero es capaz poco a poco de abrirse paso y a medida que lo hace se expande de manera exponencial, derrumbando dogmas, paradigmas, permitiendo a la gente despertar, y dándole herramientas para afrontar su propia libertad.
Es entorpecida por el estado hipnótico, dormido, dogmático de la mayoría de la gente, pero es capaz poco a poco de abrirse paso y a medida que lo hace se expande de manera exponencial, derrumbando dogmas, paradigmas, permitiendo a la gente despertar, y dándole herramientas para afrontar su propia libertad.
Estamos aquí, en estas movilizaciones,
en estas manifestaciones de la consciencia, gente cada vez mas despierta, a la cual no nos queda mas remedio que afrontar nuestra
propia cobardía, en un ejercicio de forzada coherencia,
removiéndonos de nuestra cómoda apatía, y saliendo a la calle a
luchar por lo que sabemos justo e inaplazable.
A estas alturas de la representación,
somos ya capaces de ver perfectamente las manos que manejan las
marionetas políticas.
Somos capaces de valorar su absoluta
falta de moral, principios, palabra, compromiso.
¡¡Somos conscientes!!, lo único que
nos falta es valentía para vencer los miedos a lo desconocido, y fe
para dar el primer paso.
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